Benedicto XVI y la Argentina. Cercanía con el cardenal Bergoglio y chispazos con los Kirchner
Un vínculo institucional, en el que no faltaron los sobresaltos, mantuvo el gobierno argentino con Benedicto XVI durante los ocho años de su pontificado (2005/2013), que coincidieron en nuestro país con el kirchnerismo en el poder. En ese intercambio, la relación estuvo a punto de quebrarse, a raíz del grave conflicto suscitado cuando el presidente Néstor Kirchner decidió suprimir el obispado castrense y echar a su titular, Antonio Baseotto, tras una fuerte polémica sobre el aborto con el entonces ministro de Salud, Ginés González García. La controversia había estallado en febrero de 2005, cuando aún vivía Juan Pablo II, pero las consecuencias se desencadenaron durante el pontificado de Joseph Ratzinger, iniciado en abril de ese año.